22 de diciembre de 2010

TAL COMO ÉRAMOS... TAL COMO SOMOS!!

El amor es el mas bello y tragico suspiro de un hombre y una mujer. Recuerdos, iluminan el fondo de mi mente, la llovizna empaña los recuerdos, de cómo éramos, fotografías esparcidas de las sonrisas que dejamos atrás, sonrisas que nos dimos el uno al otro, por como éramos . Así comienza la letra de esa maravillosa canción The way we were. Es extraño y verdadero ese tipo de amor que dura hasta la muerte, que nos marca infinitamente hasta lo más profundo del alma, pero que no puede tener un final feliz. Es doloroso amar con todas las fibras de un ser, a esa persona única, y que esa persona sea el motor de tu corazón, y al mismo tiempo tener el pálpito de que nunca te pertenecerá, ni le pertenecerás por entero. Sencillamente, maravilloso es el amor ... (extraído de internet)

21 de diciembre de 2010

QUIZÁS, QUIZÁS, QUIZÁS...

Durante años, se había lamido sus heridas como gata maltrecha por la pelea de tejado más encarnizada que jamás tuvo que afrontar por un trozo de pescado. Con el tiempo, lo recordaba con cariño, a pesar de todo... Y el paso de los años, lejos de enquistar el rencor, había suavizado tanto las marcas de las cicatrices, que casi ya no necesitaba las lentes graduadas que los años le habían regalado a sus ojos ajados de tanto llorar. Podía ver con claridad, y sin distorsiones, aquella alma en estado puro... Ya sin dolor, al remover viejas heridas, se daba cuenta que le gustaba lo que veía. Pero no podía evitar sentir una profunda congoja, al contemplar el alma que tanto amó desprovista por completo de armadura, con la desnudez de los niños al nacer, entregándose por completo, y a horcajadas, sobre sus manos desnudas. De nuevo reconocía al niño que siempre vio en él.

Su corazón quería gritar de alegría al ver que los años le daban la razón. Que sus heridas, no habían sido en vano, peleando por algo sin valor. Y que la miopía que entonces todos atribuyeron a su corazón, no era tal miopía, sino todo lo contrario. Se auto complacía pensando, que su mirada fue tan penetrante, se deleitó tanto en los detalles por debajo de la piel, que más que un corazón miope, lo que tenía eran unos poderosos rayos X del alma, que llegaron donde nadie pudo, o nadie quiso llegar... Solamente ella pudo ver en él, aquello por lo que tiempo después, hizo que la tomaran por loca, y que  finalmente, se dejarse vencer por las voces incesantes de las arpías y los faunos, que no cesaban de gritar su miopía, para entrar a debatirse en aquella pelea de tejado encarnizada que la postró durante largos años.

Y sin embargo, ahora tenía que ahogar su felicidad a puñetazos, porque ante ella, y más diáfano y claro que nunca, se mostraba un hombre abatido y cansado de luchar en su afán por borrar el pasado. Renegando de si mismo y desesperado por intentar no ser, lo que todos, menos ella, creyeron ver en él. Y es que, el poder de las voces de las arpías y los faunos, lo habían alcanzado a él también.

Entonces comprendió, que las heridas que ella y los demás gatos del tejado, le habían propinado a aquella alma fuertemente parapetada tras su enorme y sólida armadura de ego y vanidad inmaduras, habían sido mortales de necesidad, además de injustas... Y pensó que debía ayudarle a lamer sus heridas, hasta que con el paso de los años,  las marcas de sus cicatrices se desvanecieran hasta el punto de no necesitar las lentes graduadas que la vida le había regalado a sus ojos también, ajados de tanto llorar.... QUE EQUIVOCADA ESTABA!!

5 de diciembre de 2010

JURO CUMPLIR LO QUE ANTES SOÑE...

Esta es una de las facetas de Manuel Quijano que más me fascina... Su necesidad y capacidad para sintonizar con su público. Sus conciertos, siempre van acompañados de trocitos de su corazón...